Las grandes incógnitas del Periodismo de Opinión

 

Facultad de Ciencias de la Información (UCM)

En la Universidad Complutense de Madrid, asistimos a un coloquio entre Marta Rivera de la Cruz y David Torres. Ambos columnistas conversaron acerca del periodismo de opinión, sus características y la libertad que este género concede a determinados profesionales.

Los dos periodistas reconocen la libertad que tienen frente a otros escritores de escribir a cerca de los temas que ellos consideran relevantes. Hoy en día, los medios de comunicación acostumbran a marcar las pautas de los profesionales, lo que limita su capacidad crítica. Destacan que la verdadera esencia del periodismo de opinión reside en la capacidad que estos tienen para desarrollar aquellos temas que consideran candentes o de interés general.

David Torres afirma que la mayoría de los columnistas de la actualidad se centran en convencer a sus lectores y critica a aquellos periodistas que después de largos años de trayectoria profesional, siguen aferrados en la defensa de unas ideas que llevan toda la vida intentando denunciar y que terminan aburriendo al público. De este modo, defiende con creces la importancia de introducir toques de humor en las columnas, así como expresiones metafóricas y dobles sentidos. David Torres ejemplifica con personajes como José Luis Alvite, para transmitirnos el concepto de columnismo que los lectores buscan.

Por su parte, Marta Rivera de la Cruz nos anima a recapacitar a cerca del objetivo que guardan las columnas de opinión. A diferencia de la gran mayoría de periodistas especializados en este género, asegura que una columna ha de ser más un ejercicio estilístico que de opinión. Con ello, pretende transmitirnos la falta de capacidad de los periodistas en general para abordar un tema sin enjuiciar, ni transmitir una ideología clara. Desvela que su gran secreto reside en escribir sobre temas que realmente interesan a la sociedad para incitar a los lectores a recapacitar y obtener sus propias conclusiones.

Como columnistas profesionales, nos animan a interpretar el columnismo de opinión como verdaderos periodistas, y para ello, aseguran que es necesario pensar más como escritor que como crítico. En esta tesitura, David Torres asegura haber disfrutado realmente de columnas de opinión con las que no estaba para nada de acuerdo. De este modo, antepone la capacidad creativa y los recursos lingüísticos a la ideología y creencias de los profesionales: “En la columna vale todo si se cuenta bien”.

  

Sara Díez García